Himno Guadalupano (Levantemos un himno gigante)
Corría el año de 1931, apenas 2 años antes se habían firmado los arreglos con los cuales terminaba la Guerra Cristera e iniciaba la etapa de "Simulación" entre la Iglesia y el Estado Mexicano, apenas habían transcurrido 7 años desde el Congreso Eucarístico Nacional de 1924 en el que se entonara "Cantad, cantad la Patria se arrodilla" y el pueblo católico mexicano nuevamente se engalanaba, ahora para el festejo del IV Centenario de las Apariciones de Nuestra Señora de Guadalupe.
Entre los preparativos se trasladó el Sagrado Ayate desde la capilla de Indios a la Basílica de Guadalupe -hoy conocida como el Templo Expiatorio a Cristo Rey, así como se escribieron una serie de composiciones musicales dedicadas a festejar tan magno acontecimiento, algunas populares, pero la que hoy les comparto fue el tema oficial de las celebraciones, quedando la letra a cargo de J.L. Mariscal y los 60 compases a 2/4 que forman la música a cargo del compositor oaxaqueño Francisco Esquivel.
La letra del himno es simplemente maravillosa, consta de un estribillo por demás sencillo y 4 estrofas; la primera es una narración poética y breve del acontecimiento guadalupano, la segunda menciona como la Virgen de Guadalupe animó a los misioneros durante el virreinato y sirvió de emblema al cura de Dolores Miguel Hidalgo y Costilla así como de consuelo al pueblo católico mexicano durante la reciente -¡apenas 2 años habían transcurrido!- suspensión de culto, guerra y represión religiosa, la tercera estrofa es de alabanza...pero también de súplica, al decir "¡Virgencita Juan Diego está enfermo!¡Tú lo puedes, Señora, curar!" representando a México en la figura del Juan Diego enfermo, un México que atravesaba guerras, desórdenes sociales, la pandemia de 1918 e incluso la reciente crisis de 1929; y la última estrofa una promesa, un juramento de martirio, incluso si alguna potencia extranjera tomase México, fresco estaba a 82 años la toma de la capital a manos del ejército estadounidense en 1847...¿el poeta habrá conocido algún testigo?
CORO
Levantemos un himno gigante,
De la Virgen morena en loor,
Y que llegue hasta el cielo implorante,
De la Patria el inmenso clamor.
ESTROFAS
Hace cuatro centurias volviste,
Hacia nos tu mirada divina,
Y bañando de luz la colina,
En la roca un rosal floreció.
Y dejando tu trono de gloria,
Amorosa a esta tierra bajaste,
Y al dichoso Juan Diego le hablaste,
Y en su tilma tu imagen quedó.
¡Salve, Virgen Morena! Tú fuiste,
Del tenaz misionero esperanza;
En las manos de Hidalgo pujanza;
En el pecho del indio, valor.
Dios te salve, divina Señora,
Cuando estaba el Sagrario vacío,
Tú calmaste en las almas el frío,
Tú incendiaste los pechos de amor.
Dios te salve, celeste María,
Pues quisiste por tuyo este suelo,
No te alejes jamás, ¿Qué consuelo
Si nos dejas podremos hallar…?
Que se entreabran de nuevo las rosas
En las almas del México yermo:
¡Virgencita Juan Diego está enfermo!
¡Tú lo puedes, Señora, curar!
¡Mexicana divina! De hinojos
Te juramos por siempre quererte,
Y si acaso es preciso ofrecerte,
Nuestras vidas ¡las puedes tomar!
Y aunque ondeara un hostil estandarte
En las ruinas de México un día,
Nadie, nadie tu imagen podría
Del ayate de mi alma borrar…
Y por supuesto, dejo aquí el enlace a la partitura, transcripta en el programa MuseScore, se puede entonar en el rezo del Santo Rosario, procesiones, peregrinaciones, culto mariano o canto de salida.
https://drive.google.com/file/d/1IztvUWmtxWYnrJTEqZhmqMZLjfZO_reD/view?usp=sharing
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